miércoles, 28 de enero de 2015

Apurada reacción a la nota de Cavallo

Mi amigo Gabriel Burin me dice que mis comentarios vía Twitter al artículo que Domingo Cavallo publicó hoy en la Nación son difíciles de seguir por esa vía  y me propone publicarlo en mi blog. Como no tengo tiempo en este momento de escribir un articulo con mis observaciones, publicó los tuits casi sin edición. Prometo escribir pronto algo más organizado (y más merecedor del buen artículo que provocó mi reacción) en este blog o en el de Alquimias Económicas. Espero que se entienda.


1.     La alternativa que propone  Cavallo tiende a maximizar la reducción de la inflación y la ganancia de capital político en el corto plazo.

2.     Es una estrategia que tiene mucho sentido para países con inflaciones muy altas, como la que atacó Perú en 1991 con su plan de estabilización, tal como cita Cavallo en su nota.

3.   En casos como ese, estabilizar es la principal central preocupación económica y la supervivencia política del gobierno depende crucialmente de lograrla en forma rápida.

4.     En esa estrategia se utiliza al tipo de cambio como principal ancla nominal, lo que típicamente hace mucho más fácil desinflar rápidamente pero tiende a generar una excesiva apreciación del tipo de cambio real, como bien Cavallo reconoce en su artículo.

5.     La sobrevaluación cambiaria resultante se convierte luego en un problema, no sólo desde el punto de vista productivo y de desarrollo sino también  para la sostenibilidad de la propia estabilización, porque una corrección cambiaria posterior puede volver a acelerar la inflación.

6.     Mi inclinación, en cambio, es optar por una de desinflación gradual que genera menos ganancias de capital político en el corto plazo pero que, al depender menos del tipo de cambio como ancla, resulta en una mucho menor apreciación nominal y real.

7.     En consecuencia, esta estrategia, aunque menos exitosa en el corto plazo, no desalinea los precios relativos, protege la estructura productiva y hace la estabilización más robusta a posteriores cambios del contexto externo.

8.     Este tipo de estrategias es la que siguieron exitosamente países —como Chile y Colombia durante los 90s— que tenían inflaciones “moderadas” (alrededor de 30% anual) como la que transita Argentina hoy.